Mantente Conectado para una Buena Salud y una Piel Radiante

Cuando pensamos en salud, bienestar y el proceso de envejecimiento, la mayoría de nosotros no solemos considerar el tejido conectivo. Pero la realidad es que el 25-30% del cuerpo está compuesto por este tejido que, literalmente, nos mantiene unidos al soportar, separar y, sí, conectar los tejidos, órganos y células de nuestro cuerpo. Forma parte de nuestros huesos, articulaciones, tendones, ligamentos, cartílago, fascia y es un componente importante de nuestro cerebro, arterias y también de nuestro corazón. Además, es responsable de mantener nuestra piel en su estado más saludable y flexible. Más aún, además del papel que desempeña en proporcionar estructura y forma al cuerpo, el tejido conectivo también se encarga de nutrir, oxigenar y desintoxicar todas las células y sistemas del cuerpo.

Esta parte crítica y sobrecargada de nuestro cuerpo está compuesta por dos proteínas principales: colágeno y elastina. El colágeno es el pegamento que une todo, mientras que la elastina tiene la capacidad de estirarse y volver a su forma original. Como hemos discutido, tanto el colágeno como la elastina pueden dañarse fácilmente debido a la inflamación y al proceso de envejecimiento. La erosión de colágeno y elastina puede causar una serie de problemas de salud que van desde enfermedades autoinmunes del tejido conectivo, como la artritis reumatoide y el lupus, hasta enfermedades del cerebro, como el Parkinson y el Alzheimer, y endurecimiento de las arterias. También causa líneas y arrugas. De hecho, prácticamente todos los signos visibles de envejecimiento son manifestaciones del deterioro del tejido conectivo.

Pero la buena noticia es que, dado que el tejido conectivo desempeña un papel tan importante en muchas de nuestras funciones vitales, las estrategias para mantenerlo saludable mejorarán la construcción de tejido conectivo en todas partes. Mientras que la aplicación tópica de vitaminas C y A puede ayudar a apoyar la producción de tejido conectivo localmente en la piel, desde una perspectiva interna, los alimentos que comemos y los suplementos que tomamos para mejorar nuestras articulaciones fortalecerán nuestros vasos sanguíneos, mantendrán nuestro cerebro agudo y fortificarán nuestros huesos. La piel también se beneficia de una nutrición que construya el tejido conectivo desde adentro hacia afuera. Esto puede ayudar a minimizar la aparición de líneas finas y arrugas, prevenir su aparición en primer lugar y ayudar a retener la humedad. Aquí tienes algunos nutrientes importantes para fortalecer la salud del tejido conectivo:

• Colágeno: Encontrado en caldos de huesos y gelatina de pasto.
• Glucosamina: Encontrada en caldos de huesos, las cáscaras de crustáceos comestibles (intenta usar cáscaras de camarón para estofados y sopas) y suplementos.
• Condroitina: Encontrada en alcachofas y suplementos.
• Azufre: Encontrado en huevos, brócoli, coliflor, cebollas, ajo y repollo.
• N-Acetilglucosamina: Encontrada en jugo de aloe vera, setas y suplementos.
• Vitamina C: En fresas, frutas cítricas, kiwis y brócoli.
• Ácido Hialurónico: Encontrado en caldos de huesos, vegetales de hojas verdes, vegetales de raíz y productos de soya.

Ahora es tu turno. ¡Aprovecha estos alimentos ricos en nutrientes para apoyar tu tejido conectivo!

Gracias,
Ben